No somos debidamente conscientes de ello,pero en nuestros cuerpos se ha producido un cambio sin precedentes en la historia evolutiva.
El 100% de los habitantes de los países occidentales tenemos concentraciones de cientos sustancias tóxicas peligrosas, muchas de ellas de origen artificial.
Al respecto se han realizado análisis muy serios por parte de diversas instituciones científicas.
En España uno de los científicos que se ha ocupado más de este tema ha sido el epidemiólogo Miquel Porta que lamenta que la Administración española aún no se haya ocupado debidamente de monitorizar sistemáticamente esta cuestión en la población nacional.