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July 2009

Ftalatos y nacimientos prematuros

 

Según un estudio realizado por científicos de la Universidad de Michigan y del Instituto Nacional de Salud Pública de Méjico sobre embarazadas mejicanas , los niveles de ftalatos presentes en su orina , estarían asociados al riesgo de que sus hijos nazcan prematuramente.

Lo más preocupante es que se trata de sustancias presentes en los más diversos productos cotidianos, desde plásticos , como los de suelos de PVC o botellas, hasta cosméticos o perfumes.

Las mujeres que tenían más ftalatos en orina tenían muchísimo más riesgo de tener un parto prematuro.

El reglamento REACH

 

La "docena sucia"

 

Dos ejemplos del "control" oficial: la "docena sucia" y el reglamento REACH

Muchos científicos independientes, organizaciones no gubernamentales y las más diversas entidades públicas y privadas llevan años intentando que se instaure un principio de precaución que anteponga la salud de las personas a determinados intereses económicos. No obstante, los resultados obtenidos hasta ahora en ese afán han sido más bien modestos.

El mito de que todo está controlado

Una de las preguntas que cabe hacernos ante cosas como lo expuesto por los científicos firmantes del Llamamiento de París es: ¿nos protegen las autoridades?. En realidad, esa pregunta ya la respondían los propios firmantes de aquel documento, en consonancia con la práctica totalidad de los científicos, ya que es algo de dominio público.

Es un hecho absolutamente objetivo e incontestable que existe un insuficiente control sobre las sustancias tóxicas. Es más, es algo absolutamente objetivo e incuestionable que decir que este control es simplemente insuficiente es ser extremadamente suave.

¿Nos protegen las leyes?

Para muchos científicos conocedores de la auténtica dimensión sanitaria de los problemas de los que hablamos el panorama es descorazonador .

SALUD DE LOS SISTEMAS NATURALES

En el Fondo para la Defensa de la Salud Ambiental , aunque nos ocupamos con fuerza especial de la salud humana, en especial por la erosión de ella a causa de la polución química, tenemos una visión global que nos lleva a preocuparnos también por la salud no solo del cuerpo humano, sino del gran organismo de los sistemas naturales de  la Biosfera.

Los sistemas del ecosistema global, al igual que los del organismo humano, están sufriendo un proceso de deterioro. El planeta está enfermo.

Trabajamos a diferentes niveles, sabiendo complementar la denuncia y la necesaria concienciación.

En el Fondo prestamos atención a lo que sucede con:

BOSQUES

El efecto cóctel

Uno de los errores más importantes , ligados a la evaluación de los riesgos de la exposición a las sustancias químicas tóxicas , es el que abordamos aquí. La relevancia de este error es comparable a la de la subestimación de los supuestos niveles “bajos”.

El mito de los niveles "bajos"


Uno de los mayores paradigmas de cierta toxicología convencional es ,precisamente, la creencia de que “es la dosis la que hace al veneno”. La máxima, repetida hasta la saciedad, es que a mayor dosis del veneno, más efecto y que, por tanto, no es esperable que a niveles bajos se produzcan daños. Sobre estas ideas se han asentado buena parte de los conceptos que se critican en otros apartados de esta web. Es la base de los límites permitidos de exposición a sustancias que tradicionalmente han venido estableciéndose contribuyendo a mantener en la población falsas sensaciones de control y seguridad, al fomentar la creencia de que solo los niveles altos de exposición a tóxicos pueden tener efectos sobre nuestra salud.

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